A prueba el Nerva Exe, un nuevo scooter eléctrico español equivalente a un 125cc
El segmento de los scooter eléctricos está lleno de representantes de origen asiático que en muchos casos ofrecen productos con una calidad inferior a la que estamos acostumbrados y un precio que no necesariamente compensa esa menor calidad. La Nerva Exe no está en ese grupo, este scooter español (con fabricación china) no se puede decir que sea barato, como sucede con todos los eléctricos, pero sí tiene unos acabados y una dinámica como esperas.
La parte ciclo es de Wottan, de su modelo de 300 cc, así que este eléctrico equivalente a un 125 cc va sobrado en ese aspecto. Tiene una potencia máxima de 9 kW y un par de 48 Nm. Su batería es del gigante BYD, con una capacidad de 5,76 kWh, lo que le permite contar con una autonomía de 150 km en modo eco… porque tiene tres modos, eco, normal y sport. La toma de carga es Mennekes, así que es fácil recargarlo en cualquier punto de carga pública. Pero tranquilo si en casa no tienes punto de carga, que lleva adaptador a schucko.
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Su velocidad máxima es de 125 km/h, mayor que en los 125 cc de combustión y acelera muy bien, de 0 a 50 en 4,5 segundos y de 0 a 80 en 10,5 segundos. Pesa 202 kilos, que no está nada mal pensando en el lastre que supone la batería.
Tiene espacio bajo el asiento para un casco integral y un jet, lo que se agradece, porque en los eléctricos no suele ser normal. Llantas de 15 pulgadas delante y 14 atrás, frenada combinada CBS, pantalla TFT a color, tres años de garantía para el vehículo y cinco para la batería (sin límite de kilómetros).
Ya está a la venta ¿Su precio? 6.930 euros, pero se ofrece una fórmula de renting para las baterías que reduce el precio de compra hasta los 4.480 euros y se añade una cuota mensual de 39 euros durante cinco años. Llegado ese momento el cliente tendrá que comprar unas baterías o seguir con esta fórmula renovando por otras nuevas y con la tecnología que se esté utilizando en ese momento.
Prueba Nerva Exe
Lo primero que me ha llamado la atención, acostumbrado como estoy a los scooter eléctricos chinos, es su diseño elegante y la calidad percibida. Al iniciar la marcha descubro que hay pocos ruidos. En los eléctricos se oye todo porque no tienes el sonido del motor para camuflarlo, pero apenas hay ruidos de plásticos en los baches.
Lo que sí escuchas claramente son los frenos, que actúan rápido, no dejan mucho espacio para la retención regenerativa antes de actuar. En realidad, la retención se inicia cuando se enciende la luz del freno y tenemos sólo un mínimo recorrido de maneta hasta que actúan los frenos. Bueno, la realidad es que la conducción es muy natural.
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Se siente aplomado, acelera mucho y su velocidad es buena. Por este lado no hay pegas. Sí las encontramos en algunos puntos con un tacto un poco “áspero”, como los frenos. Otro punto a mejorar son las plataformas, un poco estrechas, pero sobre todo cortas. Tiene como un “segundo piso” que no puedes utilizar si te gusta ir en posición de piernas estiradas porque te tocaría el manillar con las rodillas.
Y dinámicamente vemos que le cuesta girar, muy posiblemente por el reparto de pesos, que carga mucho en la rueda delantera por la ubicación de la batería. Pero vamos, que no es nada grave, en una conducción normal se desenvuelve perfectamente.
Fotos: Nerva Exe
Vestuario: Casco Givi, chaqueta Seventy Degrees, pantalón Axo.
